Sabido es la falta que hace el agua en esta época, determina muchas cosas.... la naturaleza implacable esquiva de ella a los campos.
Por fin tormenta....eléctrica....
Rayos y truenos, y lo predecible incendia el monte.


Gracias a la poca lluvia que regó el suelo.... logro detener a la amalgama de calor y fuego.
El monte sana, sucumba, se estremece por estas tormentas de verano.
Verdes y se tizna.... muchas hembras de colorados... brama más callada.
Padrillos que con su huella nos comienzan a desvelar....
Y falta menos