Obesidad del perro: tratamiento en ocho pasos

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Cuánto ejercicio físico necesita mi perro

Virginia



La falta de ejercicio físico es una de las principales causas de malas conductas en nuestro perro. A veces no encontramos la causa de por qué nuestro perro muerde todo o anda nervioso a cada momento por la casa.

Pues bien, el estrés o la mala conducta pueden ir relacionados directamente con la falta de ejercicio físico.

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La ansiedad y el estrés, en la mayoría de las ocasiones, están ocasionados por un nivel de energía acumulado. Si el perro no libera esa energía, su ansiedad o estrés aumentarán.

¿Cuál es la mejor forma de liberar energía? ¡El ejercicio físico! No obstante, si bien la mayoría de los perros necesitan entre media y una hora, no todos son iguales. ¿Qué puedes hacer para solucionar la falta de ejercicio físico? ¿Qué factores debes tener en cuenta? Aquí te lo explicamos.

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Factores que tener en cuenta

La edad del perro

Esto es primordial ya que, aunque los cachorros necesitan ejercitarse, sus huesos y músculos están en crecimiento y el ejercicio físico extremo puede ser altamente perjudicial.

No obstante los cachorros necesitan actividad constante y que llegue a cansarles. Por ejemplo, lanzarles un disco, o una pelota, o una pequeña carrera de velocidad.

Sin embargo, no les hagas correr contigo o detrás de tu bici, ya que el efecto puede ser devastador para el animalito.

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Cuando los perros son ancianos, es decir, después de los 8 años, se les debe tratar como a los cachorros en lo que a ejercicio físico se refiere, mientras que los perros adultos deberán hacer ejercicio físico más intenso, especialmente si ya estaban mostrando signos de ansiedad.

Esto los dejará agotados y relajados.

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La raza del perro

No todas las razas están preparadas para un ejercicio físico intenso, ni tampoco lo requieren. Por ejemplo, el dálmata es un perro atleta, que se deprimirá si no realiza ejercicio físico. Por otra lado tenemos razas como el pomeramia, que es un perro de hogar, tranquilo y que necesita muy poco para cansarse.

Puedes hablar con tu veterinario para saber qué cantidad y de cuánta intesidad requiere tu perro el ejercicio físico.

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La hora del día

Durante la noche, al igual que nosotros, los perros cargan energía, por lo que en la mañana estarán superactivos. Si te limitas a sacarlo un ratito para que haga sus cositas y nada más, no te sorprendas cuando llegues a casa después del trabajo y encuentres la basura tirada por todos lados.

Intenta que tu perro haga ejercicio físico intenso en las primeras horas del día, aunque eso implique sacrificarte un poco y levantarte más temprano para poder dedicarle más tiempo a la actividad física de tu mascota.

Después, durante el resto del día, no tendrás que dedicarle mucho tiempo, pues el animal estará cansado y, con que por la noche le des un poco más de intensidad, dormirá como un bebé.

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Qué tipo de ejercicio físico

Con un perro puedes hacer casi cualquier tipo de ejercicio físico, el cual, obviamente, deberás elegir teniendo en cuenta los anteriores factores. Puedes pensar un sinfín de actividades para practicar con tu can. Entre otros deportes, puedes probar:

Lanzamiento de disco o de pelota.

Nadar.

Correr.

Ir tras la bici.

Andar por las montañas.

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El ejercicio físico no solo reportará resultados a nivel emocional en tu perro, sino que también se notará en su buena conducta, su obediencia, su pelo más brillante y suave y hasta en su cuerpo.

Del mismo modo que el cuerpo humano se desarrolla con el ejercicio físico, también podrás notar esto en tu perro.

No caigas en el error de pensar que porque tienes un gran jardín no es necesario que tu perro salga más que para hacer sus necesidades fisiológicas.

No importa que tu jardín tenga tres mil metros cuadrados. Tu perro necesita correr, oler otros lugares, relacionarse con otros perros, ver personas y sentir que la rutina no lo ahoga.

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Perder peso con un perro

Paco María García



Cuando se trata de estar sano y en forma existen muchas disciplinas que ayudan. Sin embargo, pocas cosas hay más más divertidas y productivas que perder peso con un perro. Realizar ejercicios con las mascotas, estrecha los vínculos y ayuda a la salud tanto del dueño como de la mascota.

Está comprobado que las personas que tienen mascotas son más activas que otras. Aunque no participen en ninguna disciplina deportiva, el paseo diario del perro disminuye el sedentarismo.

Perder peso con un perro incluyen beneficios emocionales. Resulta que algunos especialistas señalan que las mascotas se convierten en motivadores durante las rutinas de ejercicios. Así, para estar en forma basta con incluir ejercicios diarios que vayan aumentando la exigencia.

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Beneficios de perder peso con un perro

Mejora la condición física
Hacer ejercicios con un animal es ideal para personas sedentarias, y también en el caso de principiantes de una actividad deportiva.

El ejercicio mejora la circulación y el sistema respiratorio, por lo que disminuye los riesgos cardíacos; llena de energía y estimula el sistema nervioso del cuerpo.

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El ejercicio también es beneficioso en los animales; fortalece músculos y huesos, mejora la condición cardíaca y reduce riesgos asociados al sedentarismo.

Otro beneficio importante del ejercicio es que combate la obesidad, característica de los perros adultos.

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Estrecha la relación

Las actividades que se realizan en conjunto con las mascotas benefician la relación.

Fortalecen los vínculos y la comunicación entre el dueño y su perro, un aspecto fundamental en la convivencia.

Huelga decir que para los animales, el ejercicio es como un juego, por lo que siempre se divertirá.

Una manera de mantener su interés es premiarlo al final de la rutina con una galleta o comida favorita.

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Beneficia el estado de ánimo

Tener mascotas suele mejorar el humor; incluso cuando se practica ejercicio se percibe como más divertido. Jugar con animales estimula la producción de serotonina y dopamina, lo que aumenta la sensación de felicidad en la persona y, además, disminuye los estados depresivos o sentimientos de soledad.

Además, compartir tiempo y actividades con una mascota reduce el estrés y sus efectos. Sobre todo, esta se palia en gran parte cuando hacemos ejercicio.

En el caso de personas con enfermedades degenerativas o crónicas, los animales representan una gran esperanza que les llena de vida. Se convierten en una fuente de motivación primaria para superar la enfermedad.

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Promueve el trabajo en equipo

Los perros se convierten en compañeros de ejercicios para las personas, y psicológicamente es un factor de compromiso para cumplir con la rutina.

De hecho, existen algunas disciplinas que involucran directamente al animal.

Por ejemplo el Doga, que es una variante del yoga con perros, y también las carreras de relevo.

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Por dónde comenzar

Antes de iniciarse en cualquier actividad deportiva, es importante saber cuál es la condición física de la persona y el animal. Un chequeo médico general puede determinar si la persona es apta para ejercitarse físicamente.

En el caso de la persona, también se debe evaluar sus niveles de colesterol y triglicéridos, y también su rendimiento cardíaco. Esto es clave, sobre todo si no se ha tenido una actividad física en los últimos tres años de vida.

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Si existe algún interés por una disciplina específica, es probable que el chequeo sea más detallado.

Por ejemplo, si se desea correr, hay que evaluar la condición de las piernas y rodillas. Lo mismo ocurre con el animal, así que en el chequeo el veterinario podrá determinar si el perro es apto para entrenar.

Es importante tener en cuenta que algunas razas tienen mayor predisposición para el ejercicio. Por ejemplo, el pastor alemán y el labrador, son ideales para rutinas de carreras, y es más que conveniente en el retriever, cuyo físico tiene tendencia al sobrepeso cuando come demasiado o envejece.

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Por su parte, los perros pequeños como los beagle o yorkshire, deben realizar rutinas más tranquilas. En este último caso, el yoga o Doga es el ejercicio ideal para perder peso con el can.

Primeros pasos para perder peso con un perro
Toda disciplina debe irse introduciendo paulatinamente tanto en la persona como en el animal. La mejor manera es ir extendiendo el ejercicio poco a poco.

Por ejemplo, si se trata de una caminata, se pueden realizar dos caminatas diarias de 15 minutos. A la semana, esta caminata puede extenderse a 20 minutos, o incluir otra adicional de otros 15 minutos.

Si se desea acelerar el ritmo, se puede alternar la caminata con trote. Sin embargo, no hay que olvidar la condición de la mascota cuando se desee aumentar la resistencia.



Fuente:Mis Animales

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Labradores y obesidad - Causas y tratamientos



Por Lucila Ferrini, Veterinaria especializada en homeopatía y nutrición




El labrador retriever, al igual que el golden retriever, son perros muy sanos siempre que les demos los cuidados necesarios durante su crecimiento. Pero la predisposición a la obesidad de estas razas es un fantasma que los acecha durante toda su vida. Esto puede traerles enfermedades más complejas como la displasia de cadera, de codo y hasta problemas visuales debido a la diabetes.

Desde ExpertoAnimal nos pareció interesante poder encarar el tema de labradores y obesidad - causas y tratamientos para ayudar a los dueños en tener a su mascota lo más saludable posible. Dependen de nosotros para llevar una correcta alimentación y ejercicios diarios para librarse de éstos problemas.

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La obesidad en los perros y sus causas

La obesidad en los perros es una enfermedad que está causada por una mala alimentación, tanto si se trata de un producto de mala calidad o debido a un exceso, esto afecta a todas las razas por igual.

El labrador tiene cierta predisposición genética a padecerla, por lo que debemos ser muy cuidadosos a la hora de elegir su alimentación.

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Para evaluar si un perro labrador padece sobrepeso u obesidad, debemos conocer cuáles son los pesos adecuados para esta raza.

Unos kilos por encima será considerado sobrepeso pero, las diferencias mayores a 5 kg, ya estarían dentro de la categoría de obesidad.

Machos adultos: entre 28 y 32 kg de peso.

Hembras adultas: entre 25 y 30 kg de peso.

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No solamente la causa puede ser predisposición genética, sino también debemos tener en cuenta la forma de comer del estas razas. Son animales que, en general, devoran la comida con una velocidad increíble. Esto es algo, que como propietarios, debemos controlar ya que al comer tan rápido, tendemos a pensar que se ha quedado con apetito y colocamos un poco más de comida.

También sucede que piden comida cuando nosotros estamos comiendo por lo que, a veces, logran su cometido, y allí comienzan a engordar.

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Si nuestro perro come demasiado rápido, será conveniente plantearnos algunos consejos básicos para bajar el estrés que le produce la emoción de comer, relajándolos previamente.

También es interesante comprar un bol de comida con relieve en el fondo, (como el que te mostramos en la imagen).

Es ideal para estos problemas y favorecen una mejor digestión.

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Consecuencias de la obesidad

Es muy difícil como propietario resistirse a esos ojitos lastimosos que, cuando estamos comiendo, nos miran fijamente pidiendo un pedacito. Creo que es la forma más sencilla de definirlos, ¿quién no ha sentido eso?

A continuación compartiremos contigo una lista de motivos por los que no debemos dar comida humana a nuestros perros, así como en general, un exceso de alimento. Las consecuencias pueden ser muy graves:

Problemas óseos, articulares y/o musculares como displasia de caderas, codos y extremidades.
Problemas cardiovasculares.

Problemas respiratorios, que provocan agitación e intolerancia al ejercicio.

Problemas para termorregular su temperatura corporal en climas que los perjudican o durante el ejercicio. Especialmente peligroso en verano, haciéndoles susceptibles a sufrir un golpe de calor.

Diabetes y sus consecuencias, como la ceguera.

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Apatía ante juegos con otros de su misma especie o con nosotros mismos debido a que se cansan con mayor frecuencia.

Envejecimiento celular.

Problemas de piel como alergias o pelaje opaco por comer alimentos extraños para ellos.

Trastornos digestivos.

Aparición de problemas de conducta.

La lista puede ser mucho más larga, pero en este caso será importante recordar algunos de estos factores a la hora de ofrecer un extra de pienso o de nuestra propia comida al perro labrador.

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