Las orejas de un perro no sólo sirven para escuchar, sino que también nos hablan. Las orejas, al igual que la cola de nuestra mascota, son dos de los mejores indicadores anímicos y emocionales que nos pueden ayudar a saber cómo se encuentra nuestro amigo.
Así como el lenguaje corporal humano se compone de pequeñas gesticulaciones y posturas, lo mismo sucede con los gestos que nuestro compañero canino lleva a cabo con sus orejas, dado que sus inflexiones faciales no son del todo explícitas.
Aunque no todos los perros comparten la misma morfología auricular, la interpretación de los movimientos y posturas de las orejas son prácticamente universales, sólo es cuestión de poner un poco de atención.
• Orejas erectas y un poco inclinadas al frente: El perro presta atención y se enfoca en lo que está sucediendo. Análisis de la situación y concentración. Es un gesto común en cachorros que reconocen cosas nuevas o en adultos que se encuentran con algo desconocido, lo cuál por lo general va acompañado de una cabeza ligeramente inclinada.
• Orejas hacia atrás que aparentan estar caídas: Son el mayor indicador de un perro que se siente agredido, asustado o tenso. Si el gesto va acompañado de gruñidos y hocico fruncido o mostrando los dientes, suele indicar que el perro está dispuesto a defenderse si se siente atacado. Se asocia comúnmente con la cola entre las patas y una postura corporal agazapada.
• Orejas presionadas contra la cabeza y dobladas hacia atrás: Implican que el perro se encuentra sumiso y en posición pacífica. Suelen hacerlo con el fin de dar a entender al humano que son inofensivos y están listos para socializar. Es la posición más común para perros que pretenden lamer amistosamente a un humano y el resto de su cuerpo no se encontrará agazapado a diferencia del punto anterior, sino que si mandíbula se encontrará relajada.
• Orejas relajadas o neutrales: Son orejas que no se encuentran levantadas, caídas o pegadas a su cabeza. Normalmente van acompañadas de un hocico abierto, lengua de fuera y ojos abiertos. Indican que el perro se encuentra relajado y amistoso.
• Movimientos hacia delante y atrás: El perro está analizando algo que no comprende del todo. Aún no decide si es bueno o malo ni cómo se siente al respecto. Suele ser señal de reflexión sobre su ambiente y es común en situaciones de mucho ruido.
Comprender el lenguaje corporal de nuestros perros es un elemento muy importante para poder reconocer posibles señales de alarma e inclusive resolver algunos problemas de comportamiento.
Aunque las orejas son sólo una parte de cómo los perros utilizan su cuerpo para comunicarse, es necesario observar sus movimientos en diferentes situaciones para desarrollar una mayor conciencia sobre nuestra mascota.
Fuente:venFIDO