Este perro sin hogar buscaba refugio del huracán Irma en un porche de lo que en última instancia se convertiría en su hogar para siempre. La usuaria de Imgur ‘Amiawifeorasword‘, contó la increíble historia de una perrita sucia, desnutrida y asustada que vagaba por su porche en la Florida mientras la familia que ama a los animales estaba haciendo los últimos preparativos para el inevitable impacto del huracán.
La mujer dijo:
“Mientras estaba preparando nuestro patio para la gran maldad de Irma aquí en el centro de la Florida, vi a esta dulzura al otro lado de la calle. La llamé como si fuera cualquier perro y ella caminó cautelosamente. Incluso miró a ambos lados antes de cruzar la calle. Es muy inteligente”.
Comprensiblemente nerviosa, la perrita, que claramente vivió en las calles durante mucho tiempo, dudó en acercarse. Pero cuando se le ofreció comida y agua, rápidamente se acercó a su rescatista.
La pequeña comió con gran rapidez, fueron tres tazones de comida y dos tazas de agua antes de respirar. Y cada vez que la mujer entraba a la casa, ella esperaba pacientemente que regresara.
Cuando ya estaba llena, la perrita recibió mimos y frotes de panza, recordando lo que se siente ser amada.
La mujer dijo:
“Ella se puso cómoda después de ser alimentada. Por lo que hasta puso su pata en mi brazo y lo arrastraba de nuevo a su pecho cada vez que me detuve por un momento”.
Después de publicar fotos de la perrita en las redes sociales, para ver si lograba dar con su familia, la mujer descubrió que sus familiares ya no la querían. El perro había estado pasando por varias familias hasta que alguien finalmente la dejó en la carretera hace un mes, para que se defendiera por sí misma.
Sabiendo que necesitaba refugio de la tormenta, la mujer la invitó a encontrarse con su propio perro y dos gatos.
Entonces la pudo ver más de cerca y su piel estaba rasgada, sus patas ensangrentadas, su pelaje enmarañado. Había alquitrán pegado a su trasero. Lo que le haya ocurrido en el pasado le dejó desconfianza hacia los extraños. Aún así, ella entró trotando por la puerta principal y mostró todos los signos de querer abrir su corazón.
La familia entonces bañó a la perrita, y ella estaba muy rebelde, quería impedir a toda costa que la tocaran.
“Una vez que se dio cuenta de que la estábamos ayudando y no la lastimaríamos, ella dejó de luchar contra nosotros. Debe haber sido tan bueno tener esas mechas liberadas de ella tirando de su piel”.
Después de un descanso del baño, era hora de la segunda ronda. Le cortó el pelo y tan pronto como pudo, su rescatista la llevó a un veterinario para que la revisaran. Parece ser una mezcla de husky y lobo, de aproximadamente un año de edad.
Eventualmente, la mujer que se preocupó por ella en su mayor momento de necesidad decidió que la perrita perdida que vagaba por su porche ese día estaba destinada a estar allí para siempre. Así que decidió mantenerla.
La llamó Amaterasu, o Amy.
“Ella es tan amorosa y agradecida. Ella hace una adición perfecta a nuestra familia. La llamamos Amaterasu o Amy para abreviar. Ya está respondiendo a Amy como si así hubiera nacido”.
Juntos, Amy y su nueva familia esperaron la tormenta, ambos agradecidos por haberse encontrado.
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Fuente:Notas de Mascotas